martes, 11 de septiembre de 2007

Semana para el Olvido

(las citas corresponden
al tango Cambalache, 1934, letra -y música- deEnrique Santos Discepolo
10 de setiembre, 2007

Que el mundo fue y será una porquería
ya lo sé...
(¡En el quinientos seis
y en el dos mil también!).
Que siempre ha habido chorros,
maquiavelos y estafaos,
contentos y amargaos,
valores y dublé...
Pero que el siglo veinte
es un despliegue
de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos
en un merengue
y en un mismo lodo
todos manoseaos...


Que semana la que ha pasado. Desde la diputada que renuncia a su partido pero se queda con la curul, pasando por los maquiavelitos que escriben memorandos desvergonzados y culminando en el columnista que se pronuncia en favor de la restricción de la información de personajes públicos. El mundo al revés; es decir, tal cual vivimos hoy.

En el caso de la carta de renuncia de Evita Arguedas, ya de por sí poseo un instintivo rechazo al argumento patriotero, tan común, casualmente, este mes. Cuando leo que Arguedas se cubre con el manto del “sentido patriótico” y que seguirá “defendiendo los supremos intereses de la Patria” me asusto por completo, muevo mi cabeza de un lado a otro, de abajo hacia arriba y todo para ver si, así, este sentimiento que discurre entre la carcajada abierta y el sollozo fácil, empieza a definirse de una vez por todas. Pero es inútil. En medio de la risa nada contenida, una lágrima se desliza en mi mejilla, en una creciente sensación de nausea que no deja duda alguna sobre lo que pienso de esa renuncia, en particular, para peor de males, parcial, porque se va del Libertario (quien la puso ahí) pero se queda con la curul, solo para recordar que la consecuencia hace mucho dejó a la política nacional y que, reiteradamente, como en éste caso, la inconsecuencia no es más que la sombra de un protagonismo histriónico y banal.

¡Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor!...
¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador!
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro
que un gran profesor!
No hay aplazaos
ni escalafón,
los inmorales
nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
¡da lo mismo que sea cura,
colchonero, rey de bastos,
caradura o polizón!...

Por otra parte, imaginar a un columnista reconocido como Julio Rodríguez, tan permanentemente defensor de las libertades públicas, pretendiendo desviar la atención de la gravedad de los hechos denunciados por el Semanario Universidad, con relación al descaro de Sánchez y Casas, no deja de sorprender, quitar el sueño, al tiempo que las pesadillas revuelcan a cualquiera. Soy de los que se extrañan de pocas cosas, no por falta de asombro sino por ausencia de originalidad a mi alrededor, pero debo reconocer que la columna de Julio Rodríguez del pasado 7 de setiembre supera en mucho cualquier espectativa. Don Julio escribió en la mencionada columna "El memorando que ha corrido por Internet sobre la campaña del TLC debe abrirnos los ojos. Un hacker, pirata o experto en estos actos delictivos penetró en el sistema de comunicación de la Presidencia de la República y se apoderó de su contenido para hacerlo público. Igual violación han sufrido otras entidades públicas y privadas. Esta es la cuestión de fondo. Estamos expuestos. Todos sin excepción, no solo en las calles, sino en nuestras casas y oficinas, y en nuestra propia intimidad" . No hay manera que yo entienda que un periodista salga en defensa de la privacidad de lo actuado por un Ministro y un Diputado, más aún en el actual contexto, siendo que no hay nada más público que sus cargos, lo que hacen y lo que escriben en razón de él, excepto, claro está, que, a estas alturas, Rodríguez haya decidido transformar sus valores de siempre, traicionándose a sí mismo y a sus propios compañeros.

¡Qué falta de respeto, qué atropello
a la razón!
¡Cualquiera es un señor!
¡Cualquiera es un ladrón!
Mezclao con Stavisky va Don Bosco
y "La Mignón",
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...
Igual que en la vidriera irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remaches
ves llorar la Biblia
contra un calefón...

Finalmente, gracias al Semanario Universidad, hemos sabido que "estimular el miedo" a la "pérdida de empleo", al "ataque a las instituciones democráticas", a la "injerencia extranjera en el No" y al "efecto de un triunfo del No sobre el gobierno", es una de las recomendaciones que el vicepresidente Kevin Casas, y el diputado Fernando Sánchez, plantearon al presidente Óscar Arias y a su hermano Rodrigo en un memorando fechado el 29 de julio"..

Que asco. Que hastío. Que verguenza. Y saber que estos dos personajitos recientes de la política nacional siempre han contado con todas las oportunidades, que estudiaron en universidades extranjeras de reconocida calidad (lo que natura no da, Salamanca no lo presta), con recursos, de buen apellido. Que desperdicio. Tanto para tan mísera visión de su misión en la campaña del TLC y de su propia existencia. Tanto para nada o, mejor, tanto para semejante porquería, ataque a la inteligencia y transparencia. Maquiavelitos del siglo XXI. Carcomidos por el divorcio entre ética y moral. Ojos brillantes en público, falsos; miradas oscuras en privado, verdaderas. Dinosaurios devoradores de la democracia. Serpientes de la mentira. Abanderados de la mala fe ¿Con qué verguenza seguirán en la vida pública? ¿Con cuál autoridad moral?

¡Siglo veinte, cambalache
problemático y febril!...
El que no llora no mama
y el que no afana es un gil!
¡Dale nomás!
¡Dale que va!
¡Que allá en el horno
nos vamo a encontrar!
¡No pienses más,
sentate a un lao,
que a nadie importa
si naciste honrao!
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura
o está fuera de la ley...
...Que semanita, pordios..., vomitiva por cualquier lado...

martes, 28 de agosto de 2007

Cambios en el Cooperativismo

Cambios en el Cooperativismo

26 de agosto, 2007

Walter Farah C.

Soplan aires de mudanza en el cooperativismo costarricense, aunque no parece claro que sea para mejorar, sino solo para regresar. Regresar a la época cuando el cooperativismo era noticia, hace diez años, donde los titulares de prensa volvían una y otra vez al escándalo, a la crisis, a la irresponsabilidad, a la pérdida de identidad y al clientelismo. Algo así como cambiar para regresar a las catacumbas. Regresar a la catacumba para regresar a las andadas. Algo no huele bien en estos sospechosos aires de renovación

“El nuevo directorio, elegido en mayo pasado, deseaba un secretario “más técnico y menos político”, según las palabras del propio presidente del Conacoop, Edwin Barboza Guzmán”.


Hace 10 años el cooperativismo costarricense daba pena. Desprestigiado. Una dirigencia nacional metida en aventuras financieras y productivas, utilizando la membresía y recursos cooperativos para llevarlas a cabo, sin pesar alguno para pasar las pérdidas a las cooperativas de base. Prevalecía un absoluta quebranto de la identidad. Los valores se habían perdido en la jungla del oportunismo. Envuelto en los manipuleos politiqueros enraizados en las relaciones partidarias, bajo la bandera del clientelismo, el cooperativismo naufragaba en un verticalismo con nombres y apellidos, inspirados todos bajo la conducción de Rodolfo Navas y el UNACOOP que, hace diez años, ejercía el poder real de todos los poderes formales cooperativos. Hace 10 años, el cooperativismo costarricense daba miedo y vergüenza.


Todo empezó a cambiar en los cuatros años últimos de la década anterior cuando, paulatinamente y tras un esfuerzo quijotesco, en mayo de 1999, se consolidó la renovación del Plenario del CONACOOP, órgano de máxima representación del cooperativismo. Una renovación de personas, sí, pero sobre todo de estrategia, políticas, filosofía, valores y compromiso. Desde entonces, todo fue diferente.


Del cooperativismo de cúpula a un extenso liderazgo regional y sectorial. De un cooperativismo de papel a un sector respetado en todas las instancias donde participa. Del cooperativismo al servicio de los partidos políticos al cooperativismo capaz de incidir en política pública, en la OIT y en la Cumbre de Presidentes Iberoamericanos. Del abandono de la base productiva cooperativa a los planes sectoriales y regionales. Del cooperativismo de sobrevivencia al cooperativismo global. Del cooperativismo abecedario al cooperativismo de Economía Social. Del aventuralismo empresarial a la cooperativización de Atirro. De la pérdida de identidad a la incorporación del cooperativismo en los planes educativos. Del INFOCOOP VIP, a punto de desaparecer, al INFOCOOP, transformado, al servicio de los sectores. Del CONACOOP ornamental al CONACOOP consolidado. Diez años después, nadie se avergüenza de ser cooperativista.


Así que, aquí estamos, siendo nuevamente testigos de otro momento decisivo en el cooperativismo costarricense. Nadie se opone a una renovación de autoridades o liderazgos. Al contrario. No hay nada mejor, en cualquier órgano de representación, que la renovación constante de su conducción. El peligro que siempre se corre es que algunos nuevos, vestidos de presunto espíritu renovador, pueden ser algo así como la contrarrevolución o, para decirlo en un lenguaje menos siglo XX, más universal, algo así como que los malos quieren volver.

“El Instituto Nacional de Fomento Cooperativo (Infocoop) intentará recuperar un inmueble valorado en casi ¢1.000 millones. Se trata del edificio cooperativo, ubicado detrás del Mall San Pedro. Esta obra fue inaugurada en la primera administración Arias Sánchez (1986-1990) para satisfacer las necesidades de la organización cooperativa. El movimiento perdió el edificio años después, al ponerlo como garantía de proyectos bananeros de la zona sur que quebraron...El Conacoop instruyó a sus representantes en el Infocoop para que impulsen la compra del inmueble. Freddy González, presidente de Infocoop, explicó que el edificio será destinado al Conacoop, el Cenecoop, la Comisión Permanente de Cooperativas de Autogestión y Unacoop”


No es del todo descabellado sospechar que existe relación entre los cambios actuales en el CONACOOP y el Gobierno. Sospechar que el Ministro de la Presidencia ha estado plenamente informado de todo lo que ocurre, en particular por sus viejos-nuevos contactos pero no exclusivamente, y que ha intervenido. Sospechar que los aires de presunta renovación, no son más que los primeros síntomas de los viejos nexos recobrados, donde, entre compañeros de partido, se alcanzan acuerdos sobre esto o sobre aquello, tratándose de ésta o de aquella institución u organización. Sospechar, solo sospechar y algo que huele mal. Mal intencionado. Feo. Cambiar para regresar. Regresar para regresar a las andadas.


Pueden existir diferencias con el liderazgo que renovó al cooperativismo costarricense hace diez años y que hoy sufre los embates de los oportunistas, pero ninguna es suficiente para mostrar ceguera y no respetar a quienes lo transformaron por completo, devolviéndole estabilidad y dignidad. Que si renta, que si TLC, que si éste o aquel proyecto de ley, que si esto, que si aquello, que las diferencias pueden ser muchas o pocas, pero ninguna tan importante como para callar, cómplices de lo indebido.


La memoria debe servir para algo. No hay manera que crea en las intenciones y palabras de los González, Navas, Barboza y demás. No hay manera que me generen una buena vibra. Desconfío, intuitivamente, de sus argumentos y, racionalmente, de sus intenciones. Simplemente, no puedo evitarlo. Decipi non censetur qui scit se decipi No puede considerarse engañado quien se sabe engañado

domingo, 1 de julio de 2007

Salomonadas

8 de febrero, 2007

A como están las cosas, supongo que el único libre de todo interés soy yo. Habiendo estudiado filosofía, carente de toda inteligencia para los negocios, para nada apegado a los bienes materiales, poses de imagen, ansias de poder o reconocimiento público y sin ningún afán de salvador, me declaro por encima del bien y del mal, abandonado a mi propia soledad; libre de intereses.

No sucede lo mismo con el diputado Oscar López. Dado que es una persona con discapacidad visual, renunciará a participar en cualquier debate legislativo relacionado con la promoción de los derechos de las personas con discapacidad. José Merino, habiendo sido profesor en un colegio, renunciará a cualquier asunto afín con la educación.

Con esa misma lógica, los diputados del PAC, autoproclamados permanentes ejemplos para los demás, serán consecuentes con ellos mismos. De aquí en adelante, por ejemplo, en tanto consumidores, renunciarán a cualquier iniciativa en favor de la defensa de sus derechos.

Sadie Bravo, química, presentará su renuncia inmediata a la Comisión de Ciencia y Tecnología. Elizabeth Fonseca y José Rosales, docentes universitarios, se abstendrán de participar en cualquier debate relacionado con la educación superior. Nidia González, profesora de secundaria, desistirá a cualquier cuestión asociada con la educación. Orlando Hernández, médico de la CCSS, no participará en ningún asunto concerniente a la salud.

Rafael Madrigal y Grettel Ortíz, abogados de profesión, renunciarán a la Comisión de Asuntos Jurídicos. Francisco Molina, empresario en la venta y distribución de productos de limpieza, jamás volverá a participar en cualquier asunto relacionado con la promoción de la pequeña y mediana empresa.

Andrea Morales, con 26 años de edad, hoy mismo renuncia a impulsar cualquier proyecto que favorezca a la juventud. Olivier Pérez, habiendo sido funcionario del Poder Judicial, debió haber renunciado y renunciará a los futuros nombramientos de miembros en las Salas de ese Poder. Patricia Quirós, funcionaria del SENARA, renunciará a todo debate sobre el agua. Marvin Rojas, empresario de la carne, no asistirá más a la Comisión de Asuntos Agropecuarios y Recursos Naturales.

José Joaquín Salazar, funcionario del CNP, se debió abstener y se abstendrá sobre el futuro de esa institución. Ronald Solís, cooperativista, no influirá en el futuro debate sobre la ley de ese sector. Lesvia Villalobos para nada intervendrá en el debate sobre el adulto mayor y doña Leda Zamora, funcionaria del ICE, se mantendrá al margen sobre el futuro de esa institución..

¿Y Alberto Salom, a qué renunciará?

No dejarán mentir conocidos de los fenecidos Partidos Vanguardia Popular y Movimiento Revolucionario del Pueblo, cuando rememoro la fama de pequeños burgueses que tenían aquellos del Partido Socialista, Alberto Salom incluido. De hecho, aquella canción de Silvio Rodríguez, "qué fácil es...", era como una especie de sello propio de aquellos, los camaradas democráticos de entonces.

Quienes conocieron a Alberto Salom en aquella época, tampoco dejarán mentir que algo de aquel tufillo aún queda por ahí. Como actual diputado, irresponsable, lanzando dardos desde su cúpula imperial, con suficiente galillo para ensuciar, enlodar y, aún así, mantener su imagen de presunta seriedad y presunto respeto de la legalidad y la institucionalidad.

En medio de tanto párvulo y párvula, Alberto Salom lleva a la Fracción Legislativa del PAC, compuesta por gente buena que prometió seriedad, hacia el aislamiento parlamentario, mediante tronadoras bombetas, de las de verdad. Pasando por estratega cuando a lo sumo llega a panteón de errores pasados.

Fanático de bolsillo, conduce a sus compañeros de bancada a un futuro de caos, donde terminarán acorralados por acontecimientos para nada agradables y completamente desconocidos para ellos, que Salom conoce pero que, fiel a su viejo estilo, los omite y los esconde, en medio de su propio egojuego.

Alberto Salom no renunciará a nada. Imbuido en su aura redentora y dispuesto a cumplir sus propios sueños mesiánicos, no parará hasta que sea tarde, demasiado tarde. En ese momento, sin siquiera sonrojarse, sin poner atención a sus propias responsabilidades presentes, no tendrá el menor empacho en llamar a la calma y la serenidad, cual quijote de supuestos ideales democráticos, pero sanchopanza de intereses autoritarios.

Para entonces, el daño estará hecho por completo, aún más del que hoy produce, con su lengua viperina, sin importarle nada ni nadie, oportunismo encarnado desde siempre.

jueves, 29 de junio de 2006

Lo felicito

Don Walter. lo felicito porque retrata un perfil psicológico (patológico) de personas y líderes que son incapaces de ADAPTARSE al cambio de circunstancias -tanto de su ámbito externo como del interno de su ser-. El resultado son conductas totalitarias y violentas en su vida pública y privada. Las ideologías totalitarias, el irracionalismo y el fanatismo religioso son utilizados como escudo y lanza para estos inestables psicológicos que QUIEREN SOMETER LA REALIDAD A SUS PROPIAS PROYECCIONES Y EXPECTATIVAS. "Si la realidad no encaja en mi discurso y mi lógica, SALADA LA REALIDAD". Desgraciadamente en tiempos de globales cambios sociales, económicos y culturales profundos, esta esquizofrenia aumenta y con ello la ansiedad en grupos y sectores adonde estos "pirotécnicos" del verbo tienen influencia, conllevando el socavamiento de los valores de la democracia y la libertad. A pesar de que no soy libertario me parece que su cruzada pedagógica para llevar la filosofía popperiana y la de otros librepensadores al arsenal epistemológico de las personas sensatas y de buena voluntad, es un aporte valioso para el desarrollo integral de nuestra sociedad. Atte Julián Solano

" class="lien">Julian Antonio Solano Bentes

Un dirigente sindical

Fabio Chaves

Conocí a Fabio Chaves, vetusto y vitalicio dirigente sindical de ASDEICE, a finales de los ochentas. Ha pasado mucho tiempo desde entonces; don Fabio sigue en lo mismo y yo, bueno, yo he recorrido diversos caminos, no solo políticos, sino, sobre todo, de los otros, los personales.

Sobre aquellos caminos, los políticos, recientemente me escribió don Fabio, parece, un poco molesto. En el primero, me dijo: "Sos sorprendente, ayer en la izquierda, después en el PUSC y hoy con los fascistas del ML, o sea todo un mercader ideológico, te felicito por esa capacidad de cambiar tus valores ideológicos". En el segundo, "En ASDEICE detestamos a los traidores como usted que se venden al mejor postor o al Movimiento Libertario"

"Mercader ideológico" es una grave acusación. Significa que vendí mis ideas, que sacrifiqué metaprincipios y que puse precio a mis principios éticos y a mis decisiones. Parece que don Fabio conoce algo más de mi vida de lo que yo mismo sé. Poderes sorprendentes que van más allá de la sabiduría humana. Sin saberlo, estamos al frente de Fabio: un Sabio Revertido, es decir, el que sabe sin saber. Fabio Sabio Revertido sabe que soy un “mercader ideológico” pero no conoce nada de mi vida, absolutamente nada, salvo sus propios prejuicios.

Miro para atrás y no veo nada de que avergonzarme; nada que no haya obtenido con mi propio esfuerzo; a puro pulso; sin ninguna concesión más que a mi propia conciencia, asumiento, por aquí y por allá, las consecuencias de mis actos; muy alejado de la cómoda quietud de un vetusto y vitalicio dirigente sindical que, según recuerdo, alguna vez enarboló la bandera de la renovación de la dirigencia sindical costarricense; desde entonces, al menos, 16 años han pasado.

Parece que estoy en un grave aprieto en este debate. Por un lado, el poderoso Fabio el Sabio, que lo sabe todo, de todos; que lo aprehende todo; que lo sintetiza todo; todo. Por otro, yo, tan cotidiano como cualquier otro, no desarmado, es cierto; incluso con mis pequeñas ventajas acumuladas en mis propias decisiones, de mi propia vida, provenientes, acaso, de esa cierta gracia que le encuentro a cierto tipo de soledad, curtida por la permanente exigencia de ser fiel a mí mismo, conmigo mismo, sin necesidad de sabios revertidos que pretendan juzgarme y ubicarme, en uno u otro lado de su maniático maniqueísmo.

Además, la sabiduría de Fabio el Sabio es conservadora y peligrosa. En criterio de Fabio el Sabio, las personas nacen, se desarrollan y mueren, de la misma manera, con las mismas ideas. A eso se le conoce como “naturalismo teórico”, es decir, la absoluta inmovilidad. En realidad, a Fabio el Sabio no le gusta que las personas piensen diferente o, simplemente, cambien de opinión. Supone y le agrada que pensemos lo mismo, es decir, que todos pensemos lo mismo, siempre lo mismo. Por esta vía, el maniático maniqueísmo se transforma en antesala de absolutismo, sin olvidar, claro, que dentro de los sinónimos de “totalitarismo”, se encuentran “absolutismo” y “fascismo”.

Aún quedaría pendiente el debate de las ideas, por ejemplo, asociadas a “izquierda” y “fascista” que, de paso, me permitiría rememorar lo que escribí en los noventas, en un pequeño libro. En aquella oportunidad expliqué mi alejamiento de la imagen newtoniana del mundo, en particular del marxismo clásico, es decir, para precisar, de la obra de Marx y Engels y mencioné, de paso, que me sentía bien, racionalismo crítico poperiano de por medio, “en los más recientes aportes místicos-científicos derivados de la llamada Conspiración de Acuario”, lo que me llevó, entre otros, a…, pero esa sería otra historia. Y está lo del siglo XX, pero esa, también, es otra historia. De cualquier manera, en las fiestas, me presento así: "Conceptualmente, me inserto en la perspectiva de Karl Popper, Fritjof Capra y Alan Watts. Pertenezco al Movimiento Transhumanista y soy ciudadano de la República Transnacional". Pero no sé si eso será de izquierda, derecha, arriba, abajo, boca abajo, boca arriba, de pie o lo que sea. Tampoco me importa.

Antecedentes de por medio, jamás evadiría un debate teórico que combine argumentos basados en teorías y hechos (los mundos uno y tres, en el contexto poperiano -por aquello de la precisión conceptual). No prejuicios ni mala vibra. Es cuestión que don Fabio lo disponga.

domingo, 11 de junio de 2006

Seguros: Historia de un Vidente

11 de junio, 2006

El 19 de setiembre de 1991, hice pública mi renuncia como miembro del Directorio Ejecutivo de UPINS –el sindicato del INS, en un documento que titulé “La Defensa de Nuestros Derechos en los Tiempos de la Privatización”. Era el punto final de una historia que había empezado unos meses antes, justo cuando la primera administración Arias Sánchez llegaba a su fin y Calderón Fournier ocupa la Presidencia.

La negociación de convención colectiva no avanzaba y la presión interna por encontrar una solución aumentaba. Eran los tiempos donde se iniciaban las restricciones a la negociación de ese tipo de instrumentos y, debido a las de Autoridad Presupuestaria (cuando de verdad era Autoridad), se volvió imposible alcanzar el acuerdo sobre el incremento salarial que, técnicamente, entendíamos, correspondía en ese momento. Después de una huelga ingrata, en abril y mayo del noventa, se llegó a un arreglo final (omito detalles). Para entonces, todo había cambiado.

  • Cambió nuestra percepción acerca de la naturaleza del problema. Hasta ese entonces, había defendido y privilegiado la tesis de la defensa del monopolio. Después de la huelga, fueron tomando forma otras perspectivas que, de por sí, tenían su propia historia. En razón de mi cargo en la organización gremial latinoamericana -FELATRABS-, relacionada con los servicios financieros, de la Central Latinoamericana de Trabajadores –CLAT, ya había tenido acceso a información relacionada con su naturaleza y tendencias globales y regionales. El concepto de “supermercado financiero” ya estaba en el panorama; los primeros pasos de la introducción de las tecnologías en la gestión del sector, era algo más que una posibilidad y la frontera entre seguro, banca y valores era cada vez más tenue. Argentina, Brasil, Chile y México eran ya buenos ejemplos. Obviamente, vivíamos en un mundo diferente.
  • Por aquella época, el tema de la apertura y venta del monopolio de seguros y del INS ya se había introducido, la “reforma del estado”, en la agenda nacional, en particular desde el impulso promovido por don Carlos Vargas Pagán, primero como Director del Programa de Reforma del Estado y, después, como Ministro de Planificación que, a su vez, terminó coincidiendo con la agenda del PAE 3. Conocí a don Carlos cuando aún era Director de Programa y gracias que tenía su oficina al frente de las oficinas del sindicato, es decir, de las mías, en más de una ocasión conversamos sobre estos temas.
  • Un tercer factor que influyó sobre nosotros, después de aquella huelga, fue la constatación que todas las tácticas utilizadas por el movimiento sindical costarricense, para enfrentarse a los procesos de privatización, habían fracasado (CNP e INCOFER), con prejuicios para los trabajadores, sin temor a sumar, en esa misma dirección, la debilidad estratégica evidenciada en nuestra propia huelga.
  • En setiembre u octubre de 1990, además, convocamos, en el Auditorio del INS, a la “Primera Reflexión sobre los Seguros en Costa Rica”, un evento que reunió, durante cinco días, a lo más diverso de la sociedad costarricense, interesado en el tema de los seguros: dirigentes sindicales, empresarios, especialistas, políticos, representantes de gobierno, expertos internacionales, funcionarios del INS, de la Sociedad de Seguros de Vida del Magisterio, entre otros.
  • Además, habíamos llegado a la conclusión que la defensa del monopolio de la nueva administración superior del INS, Luis Javier Guier había llegado como Presidente Ejecutivo, “era una peligrosa trampa para los intereses de los trabajadores”, porque combinaba una defensa de palabra del monopolio con una política de privatización parcial de servicios del INS

A la hora de sumar todo ello, en julio de 1991, optamos por cambiar la estrategia de UPINS y abandonamos la lucha por la defensa del monopolio. El 19 de julio de 1991, en oficio UP-197-91, como Secretario General, envié a don Rodolfo Méndez, Ministro de la Presidencia de entonces, “una propuesta respecto al Instituto Nacional de Seguros”. El documento estaba dividido en tres partes: fundamentos de la posición; la propuesta y las bases del acuerdo propuesto.

  • Reconocíamos, con relación al papel del estado, que “el nuevo estado que necesita la estrategia de promoción de exportaciones es un estado pequeño pero eficiente”. Señalábamos que “ese cambio era irreversible”, dado que era “un proceso objetivo” y que, era “una falta de realismo oponerse al cambio, peor aún, es inútil”, pero señalamos que “nosotros queremos discutir e influir, en el tipo de cambio que más conviene a los trabajadores del sector seguros y a la sociedad costarricense en general”.
  • Definimos, con relación a la transformación del sistema financiero internacional, que “Costa Rica no podía ser la excepción de ese proceso de modernización de su sistema financiero” y, dado que el INS era parte de él, “no podía obviarse su transformación en vista de aquel fenómeno mucho más global”.

Por lo anterior ( en aquel documento, “aceptamos entonces una revisión del modelo que opera en materia de seguros en Costa Rica”, por lo que solicitábamos el establecimiento de algunas condiciones básicas: acceso a la información, participación efectiva de la organización sindical, transformación utilizando legislación nacional, salvaguardar la naturaleza social de los seguros en Costa Rica y las condiciones de trabajo de los trabajadores, presentes y futuros”. Las bases del acuerdo que propusimos, en julio de 1991, bajo la premisa que el INS continuaría en el nuevo mercado. Incluyeron:

  • Envío a la Asamblea Legislativa, para su aprobación, de proyectos de ley para privatizar el sistema de comercialización y para adscribir al INS dentro de lo que, en aquel momento, se conocía como “Proyecto de Ley para de Modernización del Sistema Financiero”.
  • La Constitución de una Comisión, coordinada por el Programa de Reforma del Estado del Ministerio de la Presidencia, en el contexto de la negociación del PAE 3, para “establecer los modelos apropiados de transformación del INS para cumplir, al menos, con las siguientes metas: propiciar un mayor dinamismo del sector financiero, garantizar el funcionamiento del Cuerpo de Bomberos, garantizar el respeto de los derechos de los trabajadores del INS así como de los empleados futuros del sector seguros, desarrollar un programa de remuneración por eficiencia y productividad, transformando el sistema de remuneración de una perspectiva estrecha de salario, plan que podría desarrollarse bajo el amparo de la Convención Colectiva”
  • La Comisión estaría integrada por representantes de gobierno, funcionarios del INS, representantes del sector privado y del principal partido de oposición, en aquel momento, Liberación Nacional.

El Gobierno aceptó la propuesta pero, entonces, apareció la reacción en contra de la nueva estrategia. Por un lado, “una respuesta mal intencionada de la administración y una respuesta negativa, por incomprensión, de un grupo de trabajadores de la institución”. A la administración, con nuestra propuesta, le habíamos quitado su iniciativa, evidenciando que su objetivo real era “mantener un monopolio pequeño, con un mínimo de trabajadores, que preservaba los privilegios de una reducida cúpula burocrática”. La sobrevaloración de la capacidad real de los trabajadores del INS para mantener la lucha por la defensa del monopolio, su incomprensión hacia nuevas formas de lucha y negociación y la confianza en las prédicas de la administración a favor del monopolio.

La historia culmina el 23 de setiembre de 1991. Mi situación se había hecho imposible como dirigente sindical y tuve que renunciar de mi cargo gremial; de paso, una excelente decisión, renuncié como funcionario del INS. Cuatro días antes había explicado mi renuncia. En esa ocasión escribí:

“Existen dos situación posibles:

a) Que la Administración imponga sus tesis, con lo cual los trabajadores se encontrarán desarmados y sin propuesta para defender sus intereses en el proceso de privatización del INS. Finalmente, el desmantelamiento del INS se produciría en medio de un sálvese quien pueda, que solo beneficiará a los altos jerarcas”

b) O, previendo el proceso de privatización, que UPINS logre desarrollar un proceso de negociación y lucha para preservar nuestras conquistas”

Hoy, en junio del 2006, quince años después, la historia nos ha dado la razón. La pequeña cúpula burocrática huye en tropel, importándole poco la negociación colectiva o el Cuerpo de Bomberos o el propio monopolio.

El 19 de setiembre de 1991 terminé escribiendo: “Hemos sido absolutamente francos. Nuestra renuncia es el pago por ello. Es un altísimo precio. No importa; preferimos ser incomprendidos hoy por nuestros compañeros que ser condenados por la historia”. Como se observa, quince años después, sin verguenza, puedo mantener mi cabeza en alto y los ojos al frente.

lunes, 9 de mayo de 2005

Un dia en la vida patria

9/5/2005


De los mensajes que recibí por mi columna de la semana pasada, tres de ellos llamaron mi atención. En el primero, don Gustavo Fernández consideró que mi postura abiertamente crítica contra la corrupción generalizada, en sus múltiples formas, se acercaba a una especie de nihilismo nietzscheano que no deja piedra sobre piedra. La crítica racional, en una dictadura, sea en nombre del orden o de la justicia, es artículo penal. En una democracia es sinónimo de libertad y transparencia y supone, en cualquier caso, la preservación de valores tales como la defensa del estado de derecho y la responsabilidad individual y social. Nada más alejado de la desesperación irracional de Niestzche, tan de moda en épocas de crisis. No veo por qué motivo, sólo por salvar las apariencias, la crítica debe pensarse restringida cuando el fantasma de la decadencia nacional se materializa todos los días.
En el segundo mensaje, don José Luis Amador protestó por mi afirmación de lo inmoral que representa el "reclamo de un salario mensual de nuestra incapaz e ineficiente burocracia pública..." Y precisó: "Paso mi día de trabajo muy ocupado, por eso reclamo mi salario y no tengo tiempo para leer lugares comunes y declaraciones tan generales y simplonas como el botón de la muestra". Curiosamente, a propósito de "lugares comunes y declaraciones tan generales y simplonas", don Jorge Ortega, quien también me escribió, me señaló que "mi punto de vista fue muy preciso". Cuestión de gustos, me imagino. A don José Luis le respondí que el pasar ocupado en el sector público no era, necesariamente, sinónimo de eficiencia y eficacia. En cualquier caso, con relación al sector público, uno siempre podrá inquirir por aquello que Shrek, en su segunda película, precisó brillantemente: ¿trabajando duro o durando en el trabajo?
Y en el tercero, don Carlos Enrique Ramírez, escribió: "Creo que debe ser mas estricto con la élite empresarial gobernante, y no arremeterla tanto con la clase trabajadora que ha sido la aguantadora del desequilibrio político y económico del país. Los que tiene la papa en la mano son los responsables directos. Hacia ellos cabe reclamarle y exigirle cuentas, no simples lamentos y quejas. Que pase un buen día" Le comenté que si bien estaba de acuerdo con que tales élites tienen su cuota de responsabilidad, eso no podría eximir a tantas otras élites y sectores y le mencioné algunos ejemplos.
Desde distintos ángulos, las tres reacciones comparten un elemento en común: los demás son el problema. De esa manera, la responsabilidad terminó desplazada y, cual pureza divina, la indignidad se alza contra quienes osan señalar el deber de cada quien. La desventaja de esta forma de ver las cosas, su pesado fardo, es que el compromiso no requiere mediciones cósmicas sino cotidianas y basta revisar la edición de cualquier día, de cualquier medio de prensa, para comprobar lo que somos. Veamos un ejemplo: La Nación del viernes 6 de mayo.

A un exministro de transportes se le ocurrió licitar el alquiler de un nuevo edificio, pero ese mismo exministro nunca tuvo freno alguno para criticar el gasto público. Por su parte, el propietario del inmueble, como reacción a la decisión del actual ministro de suspender la relación inmobiliria, por falta de recursos, se dirigió a la Sala Constitucional para reclamar sus derechos, en este caso, su negocio, más allá de las posibilidades reales del erario público, que le importaron un carajo. Eso sí, seguramente, con el monto del alquiler que recibirá, comprará su auto de lujo y se unirá a las quejas de quienes critican el estado actual de nuestras carreteras.
Después de tres años, el mejor argumento para justificar el por qué no se ha aplicado un nuevo manual de finanzas públicas es que es difícil de aplicar. Después de largísimo tiempo, la Caja y el Instituto Costarricense contra el Cáncer no tienen mejor resultado que firmar una carta de intenciones, previa intervención de la Presidencia de la República y pacientes de por medio. El Banco de Costa Rica, debido a los recursos presentados ante la Sala Constitucional, tuvo que suspender la medida de prohibir el uso de celulares dentro de sus oficinas, pero su mejor idea ha sido poner a un vigilante al lado de quien decida usar su teléfono (esperemos que el plan de emergencia, cuando quienes hablan supere cierto número, no sea poner a los cajeros al lado de cada quien).

Un diputado se puso en huelga porque le cambiaron la curul y el resto no tuvo más reacción, ante los discursos de sus pares, que el jolgorio. Como dejar de mencionar, a propósito de primeros de mayos, lo de aquello de diputados atentos a un partido de fútbol en medio de discursos solemnes. Una diputada, esposa de un tradicional dirigente político, que defiende a un expresidente acusado por cargos asociados a corrupción, no tuvo mejor argumento para justificarlo que un "principio de moralidad religiosa" y otro diputado, en un artículo de opinión, no dudó en argumentar que el propósito del tlc con Estados Unidos, fue, entre otros, el de favorecer "a los dueños de capital transnacional, de las patentes, de marcas de fábrica", aunque no supo decir quién va a generar nuevo empleo o no haya argumento suficiente para insistir en el tema de la propiedad intelectual para oponerse al tratado
Siete locales comerciales fueron clausurados por la Municipalidad de San José, pues en ellos funcionaban ilegalmente máquinas tragamonedas. La Alcaldesa de Montes de Oca contratará más personal porque los talleres no reparan, en un día, daños menores de los camiones recolectores. Una persona no tuvo menor empacho en un drenaje ilegal de humedales en prejuicio de la vida silvestre; su castigo: una ridícula multa de 107 mil colones. Otra persona, responsable legal de matar a otra, recibió una sentencia risible de 14 años. Una policía de la Municipalidad de San José quiso mantener su nivel de vida cobrando un pago ilegal al propietario de un hotel, a cambio de "ayuda" para reabrirlo. La Dirección General de Aduanas allanó las instalaciones de un importador de autos por uso de facturas falsas con valores menores al monto real, dejando de pagar impuestos por 8 millones. El Presidente de la Cámara Costarricense Automotriz se opone a la prohibición de importar vehículos de modelos antiguos, aunque la defensa del ambiente pase a ser, exclusivamente, un bien de difunto. Y una empresa dedicada a ventas por internet, después de 15 días, no pudo entregar la compra a un consumidor en línea y sólo pudo ofrecer devolver el dinero.

Y ya que la educación nunca puede faltar, algunas escuelas, por falta de recursos, se vieron obligadas a ofrecer agua pura a sus escolares, en vez de agua de azúcar, aunque el premio a la solución del año se lo llevan algunos centros educativos cartagineses que decidieron alimentar a unos estudiantes una semana; a otros la siguiente y así sucesivamente.
El silencio cómplice, la incapacidad, la decisión y el acto corrupto o la justificación para todo, o mejor dicho, para nada, son el pan diario de nuestra continua decadencia. Basta leer, de cabo a rabo, los diarios nacionales. Algunas y algunos aún creerán como cierta la sentencia de Heráclito: "Cuanto más grande la caída, más glorioso el destino". Lástima que, como lo evidenció el maestro Popper, después de todo, en esta cuestión, la filosofía de Heráclito no constituya más que la expresión de un sentimiento de andar a la deriva, es decir, tal cual es nuestra realidad actual: un naufragio.